palabra ministerial febrero

Palabra Ministerial Febrero 2022

Palabra Ministerial Febrero 2022


I. Tiempo en donde El Señor pelea a tu favor


«No temas, porque yo estoy contigo; no te desalientes, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré, ciertamente te ayudaré, sí, te sostendré con la diestra de mi justicia. He aquí, todos los que se enojan contra ti serán avergonzados y humillados; los que contienden contigo serán como nada y perecerán. Buscarás a los que riñen contigo, pero no los hallarás; serán como nada, como si no existieran, los que te hacen guerra.»

Isaías 41:10

Por mucho tiempo has estado oprimido por las condiciones que han rodeado tu vida, has esperado y callado ante las injusticias a las que has sido sometido, pero viene el tiempo en el cual el Señor se levanta por ti, el tiempo en donde tu rostro es puesto en alto esta por comenzar. Así te dice el Señor: «Hijo mío por años ha visto como otros se han levantado para oprimirte, para tomar tu productividad, para robar tus dones y talentos, otro han venido y han tomado lo que es tuyo, han planificado en secreto, han tratado incluso de detener tu llamado, tu unción, tu propósito, pero Yo Soy Jehová tu Dios, que he dictado sentencia favorable para tu casa, para los tuyos, me levanto en contra de los que te han oprimido, de los que han quitado el pan de tu mesa, de aquellos que valiéndose de su posición se levantaron contra ti y los tuyos. Ahora me levanto como el Dios de tu batalla, como el Dios que salva y libera, prepárate porque estás a escasos días de ver como tu condiciones son transformadas.»

II. Tiempo dirección


«23 Por Jehová son ordenados los pasos del hombre, Y él aprueba su camino.» 

Salmo 37:23

Hay muchos pensamientos en tu corazón, muchas decisiones que has estando tratando de tomar y nos tenido la certeza de lo que debes hacer. Así dice el Señor: «He visto tus planes, tus proyectos, tu manera de moverte en medio de todo lo que ha llegado a tu mano, has tratado de avanzar pero algo te ha detenido, y he visto con agrado tu manera de presentarme lo que esta frente a ti, de depender de mi, de mi palabra, de mi dirección. Hijo mío no fallaran tus pasos, no se equivocará tu camino, porque cada una de las cosas que has traído delante de mí, Yo ordenaré, yo prepararé y seré tu consejero.»

III. Tiempo de cambios de posición


«Después, el rey se quitó el anillo que usaba para sellar sus cartas, y se lo puso a José. Luego ordenó que lo vistieran con ropas de lino fino y que le pusieran un collar de oro, 43 y le pidió que lo acompañara en su carro, como su gobernador. Delante de José gritaban: «¡Abran paso!» Así fue como el rey puso a José a cargo de todo su país.» 

Genesis 41:42-43

El tiempo de la espera termino, el tiempo de tu cárcel ha llegado a su final, por años has estado detenido en medio de tu proceso, en medio de tu aflicción, de tu enfermedad, de tu desesperación, pero así como José fue procesado en medio de la aflicción y un día despertó y fue llevado a la corte de Faraón en donde Dios provoco el cambio de su posición hasta llegar a ser segundo en medio de la tierra, así te dice El Señor:

«Yo Soy quien pone anillo en tu dedo, quien pone alhajas en tu cuello, quien te viste de favor, quien corona tu cabeza de mi unción, tu calzado estoy cambiando, tus vestiduras y tunica desgastada y gris, por una de colores. Ya no te llamarán el afligido o la afligida, porque pongo sonrisa en tu rostro, Alegrías en lugar de angustias, la puerta de la cárcel se abrió y nunca más entrarás en ella, ni tu ni los tuyos, procesos de años que te perseguían han llegado a su final. He preparado una mesa en donde te sentarás y donde únicamente tienen acceso los de limpio corazón, los que están atentos a mi voz y mi llamado.»

IV. Tiempo de levantar el altar


«Entonces Elías dijo a todo el pueblo: Acercaos a mí. Y todo el pueblo se acercó a él. Y reparó el altar del Señor que había sido derribado.» 

1 Reyes 18:30

Es momento de levantar el altar, de reparar lo que esta dañado, de volver a encender el fuego, de que la llama de la adoración vuelva a arder, El Señor esta levantando hombres y mujeres que le comenzarán a buscar por las madrugadas, gente comprometida con su presencia. Así como Elías tomo la decisión de convocar al pueblo, así en tu casa alguien se levantará y se pondrá en la brecha, este es tiempo de buscar el rostro del Señor, de levantar lo que ha estado en ruinas, en adoración, en alabanza y en obediencia.